Aunque es complicado, los cuatro están firmes en su objetivo: pasar al menos la primera ronda, logro que hasta el momento no consiguió ningún boliviano. Moisés Montero y Renato Méndez, de Santa Cruz, y Daniel Soto y Noel Vera, de Cochabamba, viajarán mañana (8:00) rumbo a la ciudad húngara de Budapest, sede, del 2 al 4 de este mes, del Mundial de Karate Kyokushin.
En esta cita intercontinental será la primera vez que al país lo representan más de dos competidores. Montero y Méndez consiguieron la clasificación al ubicarse primero y tercero, respectivamente, en la categoría pesado durante el Panamericano que se desarrolló en Santa Cruz en septiembre de 2008. Por su parte, Soto (60 a 70 kg) y Vera (70 a 80 kg) se adueñaron de dos cupos al consagrarse campeones nacionales. “Somos conscientes de que será difícil, pero nosotros vamos a avanzar”, sostuvo Méndez.
El quinto competidor que estaba asegurado en esta selección es Iván Ledezma, que fue segundo en la categoría pesado durante el Panamericano de 2008 y que no consiguió apoyo para costear los gastos del viaje. La participación de cada karateca cuesta $us 2.500, de los cuales la organización se hace cargo de $us 1.700, mientras que 800 son cubiertos en parte por la empresa privada.
En esta ocasión, los que están patrocinando a los competidores son Clínica Nuclear, Gramón Bolivia, Óscar Ortiz, Ecodent, Farmacia Chávez y Vinos Kohlberg.
El karate kyokushin es un arte marcial de contacto, donde la modalidad para ganar es noquear al rival. En las semifinales, los clasificados, además de vencer a su rival, deben someterse a una prueba de rompimiento de 12 tablas, utilizando cuatro técnicas combinadas.
En esta cita intercontinental será la primera vez que al país lo representan más de dos competidores. Montero y Méndez consiguieron la clasificación al ubicarse primero y tercero, respectivamente, en la categoría pesado durante el Panamericano que se desarrolló en Santa Cruz en septiembre de 2008. Por su parte, Soto (60 a 70 kg) y Vera (70 a 80 kg) se adueñaron de dos cupos al consagrarse campeones nacionales. “Somos conscientes de que será difícil, pero nosotros vamos a avanzar”, sostuvo Méndez.
El quinto competidor que estaba asegurado en esta selección es Iván Ledezma, que fue segundo en la categoría pesado durante el Panamericano de 2008 y que no consiguió apoyo para costear los gastos del viaje. La participación de cada karateca cuesta $us 2.500, de los cuales la organización se hace cargo de $us 1.700, mientras que 800 son cubiertos en parte por la empresa privada.
En esta ocasión, los que están patrocinando a los competidores son Clínica Nuclear, Gramón Bolivia, Óscar Ortiz, Ecodent, Farmacia Chávez y Vinos Kohlberg.
El karate kyokushin es un arte marcial de contacto, donde la modalidad para ganar es noquear al rival. En las semifinales, los clasificados, además de vencer a su rival, deben someterse a una prueba de rompimiento de 12 tablas, utilizando cuatro técnicas combinadas.
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