El cochabambino de 23 años se perfila como una de las grandes figuras a nivel internacional de la gimnasia artística porque con mérito propio logró clasificar al Panamericano de Perú y al Mundial de Canadá, que se disputará este año.
El estudiante de Arquitectura de cuarto año en la UPB tiene como su principal meta dejar el nombre del país en las diferentes competencias donde dispute una medalla, si fuera posible con la de oro.
Moyano comenzó a practicar esta disciplina a los 7 años. Él tomó esta actividad como un juego, pero el entrenador Jhonny Urquidi vio sus condiciones y desde entonces comenzó a cosechar medallas locales y nacionales.
“En mi primera competencia departamental logré el segundo lugar y mi entrenador quedó conforme y mejoró mi técnica. Seguimos un entrenamiento más intensivo y logré medallas de oro a nivel nacional”.
A los 14 años tuvo que dejar la actividad por una lesión en los talones y “el dolor se volvió insoportable” y el médico me dijo que deje la actividad deportiva “por un buen tiempo”.
“En 2007, cuando dejé la gimnasia salí campeón nacional con varias medallas para Cochabamba y la Gobernación me entregó lo que hoy se llama El Premio Kanata”.
Luego de seis años, tuvo la inquietud de volver a la gimnasia y retomó los entrenamientos a los 20 años.
“Cuando volví fue prácticamente de cero. Tenía que entrenar el doble y esforzarme mucho más”.
Moyano tiene un mejor desempeño competitivo en las pruebas de tarima de piso y barra fija.
El valluno logró preseas internacionales en el torneo Sol de Septiembre, donde se colgó 3 medallas de oro y una de plata. Además, compitió en los sudamericanos de Colombia (2015) y Lima (2016), pero no ingresó al podio.
Moyano es parte del proyecto “tierra de campeones” del municipio y recibirÁ apoyo para los juegos suramericanos.
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