La fondista valluna, Rosmery Quispe, representante nacional en los JJOO Río 2016, volvió a reclamar ayer por la falta de apoyo por parte del Estado y autoridades departamentales, aquella que hasta la fecha no se visibiliza y que sólo va en desmedro de quienes participan por Bolivia en las justas internacionales.
Luego de cumplir con la prueba de maratón 42 kilómetros y en la que concluyó en el puesto 117 (2h58'32"), Quispe aseguró que su preparación y presencia en los Juegos Olímpicos corrieron por su cuenta, un perjuicio que afectó a todos los representantes nacionales.
"Los Juegos Olímpicos tienen otro nivel. Lamentablemente, el Gobierno no nos apoya directamente. Sí hacen sus eventos 10K que nos ayudan, pero no es directa, ya que el atleta se presiona para ganar ese dinero. Un atleta debería estar seguro que tiene el dinero y sólo necesita entrenar", dijo Quispe.
Durante su presencia en Río 2016, la cochabambina confesó que invirtió alrededor de 1.000 dólares para afrontar su preparación, monto bajo en relación a la de otros deportistas.
Competir por 42 kilómetros con fondistas de diferentes países del mundo mostraron un cambio total en la mentalidad de Quispe, quien insistió una vez más que el apoyo estatal es fundamental para conseguir los objetivos.
"Vi que los atletas (etíopes y keniatas) entrenan todo el día, están bien hidratados. A nosotros los bolivianos nos falta que nos apoyen económicamente, ya que nos faltan suplementos, vitaminas y todo eso. En 10 o 20 años podemos lograr una medalla", aseguró Quispe.
Pese a esa falta de compromiso del Estado e instituciones departamentales, Quispe dijo que la apuesta por seguir mejorando y creciendo en este deporte está latente.
Además, la experiencia obtenida en Río 2016 le permitirá a otros atletas prepararse de mejor manera para alcanzar los próximos Juegos Olímpicos Tokio 2020.
Participación
Pese a quedar en el puesto 117 entre 157 maratonistas, Quispe dijo estar conforme con lograr atravesar la meta en Río 2016.
El intenso calor (se compitió a mediodía por las calles de Río de Janeiro) y otros factores mermaron al rendimiento de los participantes, algo que no aconteció con Rosmery, ya que tomó sus recaudos para evitar un severo cuadro de deshidratación.
"Quedo conforme, dije que quería atravesar la meta por Bolivia, pese a que yo vi la maratón de los varones y muchos abandonaron. Si bien es complicado, uno quiere llegar a la meta por su país", remarcó Quispe.
Preparación
Durante 15 años, Quispe entrenó bastante para representar al país en los JJOO.
Con pocos recursos y sin ayuda gubernamental, la atleta cumplió un sueño que persiguió desde el inicio de la década pasada.
Ahora, ya consagrada como deportista olímpica, la fondista cochabambina apuesta por llegar a Tokio 2020 y alentar a nuevos valores a seguir el camino de la superación y la ambición de representar a Bolivia en el extranjero.
FAB CALIFICA PARTICIPACIÓN COMO EXITOSA
El presidente de la Federación Atlética Boliviana (FAB), Marco Luque, calificó ayer como exitosa la presencia del atletismo nacional en Río 2016.
"Es la mejor participación boliviana en Juegos Olímpicos en general. Hubo un buen proceso de trabajo, buenos resultados. Nos acercamos a la élite y objetivo cumplido. Los atletas que fueron con más anticipación se aclimataron muy bien", remarcó.
A futuro, el titular de la FAB indicó que hay muchas cosas más por hacer, entre ellas la de contar con un mayor apoyo sistemático para los atletas.
La participación de seis atletas en Río 2016 (la disciplina con más representantes por Bolivia) marcó historia en el deporte base nacional.
Por ese motivo, Luque se mostró confiado en que para Tokio 2020 se tendrá un mayor número de participantes y que darán más frutos al país.
ROSMERY QUISPE. FONDISTA COCHABAMBINA
Terminé muy bien la maratón, di todo y cuidé la hidratación. Vine más motivada para mejorar; a los bolivianos falta que nos apoyen más
No hay comentarios:
Publicar un comentario