Daniela, de 26 años y en proceso de titularse de la carrera de Comunicación Social de la Universidad Católica Boliviana de Cochabamba, nació en un ambiente hípico bajo el techo de una larga tradición familiar. Su padre fue un gran jinete.
La siete veces campeona departamental (1997, 1998, 2000, 2006, 2007, 2008, 2009 y 2010) cuenta que sus máximos logros en el deporte ecuestre se deben a que ha logrado complementarse perfectamente con otro ser vivo, su leal caballo.
Daniela, quien nació en Cochabamba el 18 de mayo de 1989, también ha conquistado cinco títulos nacionales en varias categorías: 1998, 2007, 2008, 2009 y 2010.
La apasionada valluna del hipismo asegura que la equitación es un deporte que requiere de mucha disciplina, dedicación y pasión. Enseña a organizar el tiempo y particularmente a trabajar en equipo. Sin embargo, advierte que esta disciplina exige que uno tenga su propio caballo.
Es hija de Alfredo (padre) y Brigitte (madre), además hermana de Andrea y Raúl. Se declara admiradora de Meredith Michaels Beerbaum, quien es campeona mundial de equitación.
“A quienes les gusta los imposibles, podrán sentirse volar sin tener alas y combinar su inteligencia con la fuerza de un animal noble”, asegura Daniela.
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