Huatajmanta riqurimuni (renacer, en quechua), dice optimista Óscar Soliz mientras limpia su bicicleta de fibra de carbón, regalo del presidente Evo Morales, durante un entrenamiento en Cochabamba. El ciclista potosino simboliza con la frase, de su lengua materna, lo que intenta lograr en la primera versión de la Vuelta a Bolivia, que ya rueda por las carreteras del país, en un año que es de poca fortuna para él.
“Quiero demostrarle a la gente que puedo salir de este bajón; no tuve un buen año y quiero renacer”, afirma el ciclista del equipo Villazón.
Luego de consagrarse como el campeón histórico de la Doble Copacabana de ciclismo 2007 —algo que ningún boliviano había conseguido antes—, el pedalista desaparece de las portadas de los periódicos y de la prensa deportiva. “Sí, reconozco que fallé este año; no gané ninguna competencia del país. Cuando a un deportista le va bien todos son amigos, pero cuando le va mal pocos se acuerdan de uno”.
Soliz tiene retos en la Vuelta a Bolivia, entre ellos está mejorar su imagen como pedalista para renovar un nuevo contrato con Coordinadora EBSA, de Colombia, equipo al que está ligado actualmente. “El acuerdo con los colombianos termina este año. Espero hacer buen papel para renovar”, afirma.
El campeón de la última versión de la Doble 2007 no se entrenó con los cafetaleros en 2008. “Ése es uno de los motivos por los que no obtuve buenos resultados en el año. Estuve en Colombia hasta marzo y tuve que regresar por problemas familiares”, añade Soliz.
Para ser parte de la Vuelta, Soliz cuenta con dos bicicletas, la titular, con un valor aproximado de 5.500 dólares, un obsequio del Mandatario de la República, y la suplente que cuesta la mitad y que pertenece al equipo Villazón.
“Compramos seis bicicletas para todo el grupo, la más cara servirá para los tramos complicados y la menos costosa para los tramos accesibles”, explica Luis Avilés, técnico de Villazón.
El pedalista, de 23 años, es uno de los principales candidatos a conseguir un papel destacado con los colores bolivianos, no sólo por su gran destreza como escarabajo, sino también por los conocimientos que adquirió en la temporada de 2007.
“Me considero uno de los mejores escaladores del país. Aprendí mucho en Colombia; me enseñaron a mejorar en las superficies planas y a tener velocidad”, comenta el potosino. El pedalista, nacido en Cotagaita pero educado en Villazón, advierte que pondrá en práctica sus conocimientos, especialmente en el oriente. “En Santa Cruz estaremos en el pelotón, sin sacrificar etapas, para llegar bien a Cochabamba, donde utilizaremos la estrategia de empujar al pelotón, evitando que haya fuga. Ya en el occidente impondremos otro plan”, dice.
Soliz se inició en las ruedas a los 15 años, en bicimontaña, y a los 18 tomó la decisión de adentrarse a la ruta.
El perfil
Nombre: Óscar Soliz Villca.
Lugar y fecha de nacimiento:
En Cotagaita, Potosí, el 9 de enero de 1985.
Familia: Anacleto Soliz y Florencia Villca (padres). Zaira, Leandro y Morelia (hermanos).
Equipo: Villazón.
“Quiero demostrarle a la gente que puedo salir de este bajón; no tuve un buen año y quiero renacer”, afirma el ciclista del equipo Villazón.
Luego de consagrarse como el campeón histórico de la Doble Copacabana de ciclismo 2007 —algo que ningún boliviano había conseguido antes—, el pedalista desaparece de las portadas de los periódicos y de la prensa deportiva. “Sí, reconozco que fallé este año; no gané ninguna competencia del país. Cuando a un deportista le va bien todos son amigos, pero cuando le va mal pocos se acuerdan de uno”.
Soliz tiene retos en la Vuelta a Bolivia, entre ellos está mejorar su imagen como pedalista para renovar un nuevo contrato con Coordinadora EBSA, de Colombia, equipo al que está ligado actualmente. “El acuerdo con los colombianos termina este año. Espero hacer buen papel para renovar”, afirma.
El campeón de la última versión de la Doble 2007 no se entrenó con los cafetaleros en 2008. “Ése es uno de los motivos por los que no obtuve buenos resultados en el año. Estuve en Colombia hasta marzo y tuve que regresar por problemas familiares”, añade Soliz.
Para ser parte de la Vuelta, Soliz cuenta con dos bicicletas, la titular, con un valor aproximado de 5.500 dólares, un obsequio del Mandatario de la República, y la suplente que cuesta la mitad y que pertenece al equipo Villazón.
“Compramos seis bicicletas para todo el grupo, la más cara servirá para los tramos complicados y la menos costosa para los tramos accesibles”, explica Luis Avilés, técnico de Villazón.
El pedalista, de 23 años, es uno de los principales candidatos a conseguir un papel destacado con los colores bolivianos, no sólo por su gran destreza como escarabajo, sino también por los conocimientos que adquirió en la temporada de 2007.
“Me considero uno de los mejores escaladores del país. Aprendí mucho en Colombia; me enseñaron a mejorar en las superficies planas y a tener velocidad”, comenta el potosino. El pedalista, nacido en Cotagaita pero educado en Villazón, advierte que pondrá en práctica sus conocimientos, especialmente en el oriente. “En Santa Cruz estaremos en el pelotón, sin sacrificar etapas, para llegar bien a Cochabamba, donde utilizaremos la estrategia de empujar al pelotón, evitando que haya fuga. Ya en el occidente impondremos otro plan”, dice.
Soliz se inició en las ruedas a los 15 años, en bicimontaña, y a los 18 tomó la decisión de adentrarse a la ruta.
El perfil
Nombre: Óscar Soliz Villca.
Lugar y fecha de nacimiento:
En Cotagaita, Potosí, el 9 de enero de 1985.
Familia: Anacleto Soliz y Florencia Villca (padres). Zaira, Leandro y Morelia (hermanos).
Equipo: Villazón.
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