Los Juegos Suramericanos se celebran en Bolivia por segunda vez, ya que en 1978 se llevó a cabo en La Paz la primera edición, conocida entonces como Juegos Cruz del Sur.
La undécima edición tiene como sede principal a la ciudad de Cochabamba y como subsedes a catorce municipios del departamento homónimo, además de la ciudad de La Paz.
Durante catorce días competirán en 35 disciplinas 4.031 atletas de Argentina, Aruba, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, Guyana, Panamá, Paraguay, Perú, Surinam, Uruguay y Venezuela, según datos del Comité Organizador de los Juegos Suramericanos (Codesur).
De los 35 deportes en disputa, 16 son clasificatorios a los XVIII Juegos Panamericanos de Lima 2019.
El estadio Félix Capriles de Cochabamba, remozado para el evento, acogerá la inauguración hoy (19:00), es uno de los 43 escenarios de las pruebas.
Unas 8.000 personas está previsto que sean parte del espectáculo inaugural, que durará unas dos horas en las que se pondrá en escena una decena de escenografías de la diversidad cultural del país anfitrión.
El fuego que encenderá el pebetero ha recorrido buena parte del país desde que fue encendido el pasado 7 de mayo en Tiahuanaco, antigua capital de una cultura preincaica, en una ceremonia ancestral con amautas o sabios indígenas.
El encendido del fuego en esa ciudadela prehispánica se repite cada cuatro años desde 1978, cuando se efectuaron en La Paz los primeros juegos.
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