Bolivia es la gran favorita para quedarse con la medalla de oro en el raquetbol de los Juegos
Suramericanos de Cochabamba y ello no genera presión en los jugadores nacionales, quienes ven
ese aspecto como una motivación extra para obtener la ansiada presea dorada.
“Esta presión sobre nosotros la siento como una motivación extra para jugar mejor, me motiva muchísimo más el hecho de ser locales, tener a mi gente apoyándome, conocer lo que tenemos aquí. Pareciera que es presión, pero creo que es lo contrario, es una bendición para nosotros tener
todo ese apoyo”, señaló Conrrado Moscoso, quien jugará en la modalidad de singles y dobles.
“Personalmente no tengo ningún tipo de presión ya que tengo bastante experiencia. Sí veo esa presión en otras disciplinas que no recibieron apoyo, pero nosotros no, estamos bien”, manifestó Carlos Keller, el otro jugador de singles.
Su hermano mayor Roland, quien hará pareja con Moscoso, acepta que sí hay presión, pero que sabe controlarlo. “El ser locales genera algo de presión, pero sabemos manejarla y con el apoyo de nuestra gente nos vamos a olvidar de todo eso y vamos a demostrar lo que mejor sabemos”. Los tres coincidieron, al igual que el cuarto integrante del equipo masculino: Kadim Carrasco, y sus compañeras Yazmine Sabja, Valeria Centellas, Jenny Daza y Angélica Barrios, que el único objetivo que tienen en este evento internacional es la medalla de oro en todas las modalidades: singles, dobles y por equipos en ambas ramas.
Bolivia es una potencia mundial en esta disciplina junto a México y Estados Unidos, pero como estos países no estarán en la competición deja el camino libre a la selección nacional para conseguir el metal dorado.
EL EQUIPO
Singles varones: Conrrado Moscoso, Carlos Keller; dobles varones: Conrrado Moscoso y Roland Keller; suplente: Kadim Carrasco. Singles damas: Yazmine Sabja y Valeria Centellas; dobles damas: Jenny Daza y Angélica Barrios.
PRENSA FEBORA
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