Los ajedrecistas bolivianos Jessica Molina y Adonay Delgadillo obtuvieron los títulos de Candidata a Maestra y Maestro Fide, respectivamente, en la Olimpiada de Bakú, en Azerbayán.
La obtención de estos títulos significa “que seguimos ascendiendo en el ajedrez internacional. Obtener esos títulos en una Olimpiada Mundial confirma una vez más que el ajedrez boliviano está a la altura de los competidores internacionales”, declaró el presidente de la Federación Boliviana de Ajedrez (Fba), Alan Borda.
En la rama masculina, Bolivia arrancó en el puesto 95 y después de 11 rondas de juego concluyó con un ascenso hasta el lugar 75. La apertura fue modesta y para las partidas finales llegó a pelear por el primer lugar de su grupo.
En el caso de las damas, en el ranking inicial apareció en el 50, pero al final de la competencia quedó en el 90. Durante los primeros días las ajedrecistas hicieron un buen papel, pero tuvieron dificultades para sostener ese ritmo en las siguientes rondas.
“Estamos contentos por la participación de los deportistas, la experiencia nos sirve para mejorar con miras a las siguientes Olimpiadas, que es en Batumi (Georgia) 2018”, indicó Borda. Cada ajedrecista corrió con el gasto de su pasaje desde Bolivia hasta Azerbaiyán. “Fue una participación sin apoyo”, dijo el titular y agregó que “eso obviamente resta posibilidades para obtener mejores resultados”.
La delegación boliviana estuvo formada por: Lucía Estrada (Maestra Internacional), Nataly Monroy (Maestra Internacional), Daniela Cordero (Maestra Internacional), María Eugenia Ramírez (Maestra Fide) y Jessica Molina (Candidata a Maestra) con el argentino Blas Mariano Pingas (Maestro Fide) como capitán. Completaron el grupo: José Daniel Gemy (Maestro Internacional), Carlos Saavedra (Maestro Fide), Luis Miguel Aguilar, Adonay Delgadillo (Maestro Fide) y Alejandro Parraga con el italo-argentino Carlos García Palermo (Gran Maestro) como el capitán.
APG
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