Hasta los primeros años de la década de los 90, La Paz era un referente de la natación boliviana. Las victorias en el ámbito nacional eran frecuentes y el aporte a las selecciones nacionales era importante. Después se inició una caída libre, perdió presencia en el país y tomaron esa posta Cochabamba y Santa Cruz.
En La Paz, la falta de un escenario adecuado para la natación fue determinante para el bajón, especialmente tras el cierre de la pileta de Obrajes, donde había una sostenida actividad.
Los clubes, en su mayoría, empezaron a deshacerse. Unos pocos, gracias a piscinas privadas, pudieron salvarse.
La presidenta de la Federación Boliviana de Natación, Silvia Crespo, y la de la Asociación Departamental de La Paz, Marta Otazú, coinciden en que a partir de la reapertura de Alto Obrajes los años de penurias van a terminar y vendrán días mejores.
“La Paz no cuenta con piscinas que sean reglamentarias. La de Obrajes, donde se forjaron los mejores deportistas de la natación, lamentablemente, no sé por qué, fue reducida en tamaño” y ya no sirve para el nivel competitivo, según Crespo.
Asegura que la reapertura de Alto Obrajes será “una fiesta para la natación, primero por el espacio, pues se trata de una piscina de 50 metros, donde obviamente se puede practicar y entrenar mejor que en una de 25. Se van a poder completar más ciclos de entrenamientos adecuados para el nivel competitivo”.
“La Paz tendrá la posibilidad de recuperar el sitial que tenía en el ámbito nacional, que también se había convertido en el semillero de toda la natación boliviana”.
Recuerda que por años La Paz prácticamente era “campeón invencible a nivel nacional. En cambio, tras el cierre de Obrajes, existió un bajón de deportistas y toda una camada muy grande de nadadores tuvo que pasar por la crisis de no contar con infraestructura”.
Otazú considera que la reapertura del escenario de Alto Obrajes “será de un beneficio absoluto para la natación, porque si La Paz ha perdido el sitial que tenía hace unos años en el ámbito nacional, es precisamente porque faltan piscinas donde los deportistas de competición puedan prepararse y entrenar.
Nuestra desventaja frente a Cochabamba y Santa Cruz es que ellos sí cuentan con piscinas de 25 y 50 metros para entrenar como se debe y para cumplir con toda la preparación física que debe tener un nadador de alta competencia”.
Las piscinas municipales de La Paz están dando “una mano para, de cierta manera, poder hacer competencias, pero son las únicas a las que podemos recurrir; sin embargo, sólo la del Lastra tiene las medidas mínimas adecuadas: de 25 metros. Empero, le falta partidores, entonces no tiene todas las condiciones”.
Insiste que el uso de la piscina de Alto Obrajes se constituirá en “el primer paso y también definitivo para que La Paz vuelva a ser campeón nacional, esa piscina será el escenario ideal para que los nadadores paceños mejoren su rendimiento”.
Habrá torneos locales, nacionales e internacionales
La Gobernación de La Paz, a través del Servicio Departamental de Deportes (Sedede), trabajará de manera coordinada con la Federación Boliviana y la Asociación Departamental de La Paz para que la piscina de Alto Obrajes beneficie a la natación en general y sea escenario de certámenes no sólo departamentales y nacionales, sino también de corte internacional.
Alberto Alvarado, director del Sedede, asegura que “el deporte competitivo va a tener su espacio, porque se trata de la única piscina reglamentaria; por lo tanto (los deportistas) tienen que trabajar en ella”.
Anuncia coordinación con la dirigencia de la natación, principalmente con la de la Asociación Departamental “porque a través de esa instancia se podrá canalizar el uso de la parte competitiva”.
La intención es elaborar “un proyecto serio, en el que estén involucrados la federación, la asociación departamental y las municipales de tal manera que todos jalemos el carro para un solo lado y no haya discrepancias”.
“Ahora nos podemos dar el lujo de traer campeonatos nacionales y también internacionales”.
Marta Otazú, de la asociación departamental, expresa que ya hubo reuniones con Alvarado y la presidenta de la Federación, Silvia Crespo, “para que la piscina tenga el mejor uso”.
La natación en La Paz se transformó en ‘elitista’
La falta de piscinas ha convertido a la natación en un deporte de élite en La Paz. Antes, el grueso de la población podía ir a nadar, ahora eso no ocurre.
Silvia Crespo cuenta que desde que asumió la presidencia de la Asociación Municipal en 2005, posteriormente la Departamental en 2007 y finalmente de la Federación en 2009, “solamente hemos podido hacer dos nacionales en La Paz”, por la falta de escenarios reglamentarios.
La piscina del COE (Círculo de Oficiales del Ejército) en Calacoto fue la sede de ambos eventos: “Gracias a Dios nos abrieron las puertas”.
El club Los Delfines, del que es parte, y también el de la Universidad Católica Boliviana se entrenan en ese escenario. “El resto de la natación se ha vuelto elitista, porque entrena en clubes privados que tienen piscinas, como el Tenis La Paz, el Hípico Los Sargentos o el Petrolero”.
Crespo remarca que cuando había la piscina de Obrajes la natación era más popular, las condiciones para entrenar eran iguales para todos y, por tanto, había más posibilidades de formar nuevos valores, que competían tanto en el ámbito departamental como en el nacional.
Marta Otazú valora, sin embargo, el trabajo que actualmente se hace en las piscinas municipales “porque son formativas, para que los chicos aprendan a nadar, su gran mérito es ése, que no son caras e incluso han conformado clubes para participar de la asociación departamental y ahora están ingresando también a ser parte de las selecciones”.
La ‘gente de a pie’ también tendrá un lugar
Alvarado manifestó que la “gente de a pie” también tendrá el derecho de utilizar la piscina de Alto Obrajes, “aunque seguramente habrá horarios especiales, con un previo requisito que será una ficha médica que tendrán que sacar de la Clínica del Deporte, y tener el respaldo de algunos salvavidas, de personas que sean guías, que sean entrenadores, que estén supervisando todo para que no ocurra ningún problema”.
La autoridad anticipó que para la “autosostenibilidad de la piscina” su uso tendrá un costo, “pero nosotros tenemos que cobrar costos bajos, accesibles para todos; al mismo tiempo dar un buen servicio y para eso, insisto, necesitamos configurar un proyecto serio”.
El Director del Sedede recordó, asimismo, que las escuelas deportivas cumplen una labor formativa y, en el caso de la natación, Alto Obrajes será de gran ayuda.
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