Bolivia tiene en Rudolf Knijnenburg (31 años), de tiro deportivo, a uno de sus atletas destacados porque es una carta de triunfo en los Juegos Sudamericanos que se realizarán en Santiago de Chile del 7 al 18 de marzo.
Campeón sudamericano en varias oportunidades y medalla de oro en los Juegos Bolivarianos Trujillo 2013 avalan su jerarquía.
Practica el tiro deportivo desde sus 12 años y ahora a los 31 años es un deportista consagrado.
No fue nada difícil para él manejar un arma, el tener una al lado suyo hizo que sea algo normal para él y llegar a practicar el tiro deportivo fue natural.
“Mi papá fue tirador deportivo, yo lo acompañaba al polígono desde chico y después comencé a practicar y empezó a ser mi pasión”, contó Knijnenburg.
“Nosotros vivíamos en el campo y tener un arma era normal, por lo que aprender a manejar una no fue nada difícil”, añade.
Para él un arma es sólo un “instrumento deportivo” y el que más le gusta es la pistola, por su complejo manejo.
“La pistola se maneja sólo con la mano, sin apoyos adicionales, por lo que se necesita la mayor destreza”, comenta.
Asimiló las enseñanzas de varios entrenadores, aunque su alto nivel competitivo lo debe sólo a la práctica. “En una ocasión practiqué con el entrenador de la Selección Argentina durante 15 días y después con los entrenadores que contrató la Federación Boliviana de Tiro Deportivo, pero sumando los días no se debe llegar a un año los días que tuve entrenadores, sólo vale la práctica que se adquiere y la capacidad personal”.
Knijnenburg practica durante cinco horas diarias cuando se acerca una competencia, aunque también señala que “el 90 por ciento de un disparo es psicológico”. Desde hace cinco años, Knijnenburg trabaja con una psicóloga deportiva, Tusnelda Flores.
“Desde el año 2000 batió récords cada año y el talento se mantiene. Ahora vienen los Juegos Sudamericanos y daré mi mayor esfuerzo para conseguir una medalla para el país”.
Del 13 al 24 de este mes practicará con un entrenador búlgaro, Jean Milov. contratado por la Gobernación de Santa Cruz.
“En los juegos Olímpicos de Atenas 2004 me traicionaron los nervios, eso ya lo superé.
Rudolf Knijnenburg
Volvió con oro de Perú
Su participación en los Juegos Bolivarianos que se efectuaron en noviembre de 2013 se concretó por apoyar a la Federación Boliviana de Tiro Deportivo (Febotid).
“No asistí a competencias internacionales en 2012 y recién volví a asistir a un evento en los Juegos Bolivarianos de noviembre del año pasado. Yo fui a los Bolivarianos para apoyar a la Federación, que necesitaba el respaldo de nosotros, para que ganemos medallas y así estar más fuerte, y así fue”.
La prohibición de importación de municiones hizo que en su momento no acuda a torneos internacionales, algo que ahora cambió, ya que “representar al país es lo más importante”.
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