La marcha continúa marcando historia

Los Juegos Olímpicos Río 2016 ya marcan un hito en la historia del deporte boliviano, porque por primera vez siete deportistas clasificaron con marcas mínimas; pero además Bolivia registrará otro hecho histórico: por primera vez estará presente con un equipo completo en una de las categorías de marcha. En este caso el de damas, 20 kilómetros.

No es la primera vez que un marchista logra clasificarse con marca a los Juegos Olímpicos, porque hace años lo hicieron Geovana Irusta y después Claudia Balderrama, ambas en los 20 km, pero ésta es la primera vez que cinco marchistas consiguieron la marca mínima para concurrir a los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, cuatro en los 20 km: Ángela Castro, Wendy Cornejo, Stéfany Coronado y Marco Rodríguez; y uno en los 50 km, Ronal Quispe, todos ellos entrenados por Martha Marín. A ellos se suman Rosmery Quispe que clasificó maratón, y Karen Tórrez en natación, para completar los siete deportistas con registros mínimos que representarán a Bolivia en Río 2016.

Del grupo de los marchistas, Castro, Cornejo y Coronado integran el equipo de marcha. Este grupo se consagró campeón sudamericano en Guayaquil, Ecuador, en marzo de este año. Además, ocupó el octavo lugar en la Copa Mundial de Marcha, en Roma, Italia 2016, en mayo pasado, tan solo por debajo de Colombia (que fue tercera) a nivel sudamericana y por encima de Ecuador (10ma) y Brasil (15ta).

Pero más allá del hito histórico, para Bolivia representa un gran desafío el asistir al evento con equipo completo, y las propias atletas lo reconocen. “El trabajar y competir en equipo eleva el nivel al que se pueda alcanzar en la prueba”, señalan.

Ángela Castro, la actual campeona sudamericana y la dueña del récord nacional en los 20 km, reconoce que los últimos logros obtenidos fueron gracias a que empezó a trabajar en equipo, una vez que se unió al entrenamiento con Martha Marín en julio de 2015.

“Con la entrenadora Marín empezamos a trabajar recién hace un año, aunque yo entreno hace siete, pero en la carretera éramos él (su entrenador) y yo, no tenía un equipo de trabajo, ahora sí, es por eso que se ha mejorado bastante, siempre estamos apoyándonos con las chicas. Me cambie desde julio con la profe, el trabajo es más llevadero, no es tan cansador cuando trabajamos en equipo, decimos por ejemplo: la siguiente te toca jalar Wendy, la siguiente vuelta a ti Stefany, y así lo hacemos en plena competencia. Si te quedas atrás sola, ya perdiste, porque solita no se puede, en pelotón es más fácil”, comentó Castro.

De la misma opinión es Stefany Coronado, quien dijo que trabajar en “equipo es fundamental, sobre todo en los 20 km, porque ayuda mucho el entrenamiento que se tiene. En las series una jala en un kilómetro, luego jala la otra, tanto Wendy, Ángela, como mi persona, tenemos la facultad de apoyarnos, por eso competir en equipo es fundamental”.

Pese a que en la Copa Mundial de Marcha como equipo ocuparon un octavo lugar, la entrenadora Marín es consciente de que pese a que las marcas de los marchistas bolivianos están cerca de los mejores, todavía están lejos; por lo tanto, el sueño de conquistar una medalla olímpica siempre estará presente, y trabajarán para conseguirlo. El objetivo en Río 2016 es entrar entre los 20 primeros, no sólo en el equipo de damas, sino también en el caso de Marco Rodríguez y Ronal Quispe.

“No tenemos que ser muy exitistas por el hecho mismo de que clasificamos con una buena marca, porque aún estamos lejos. Conquistar la medalla olímpica no es imposible, pero nosotros estamos dando el primer paso, que era clasificar con marca propia. Nosotros iremos a pelear por estar entre los 20 mejores. No podemos hablar de medallas, porque yo veo la realidad y no es así”, explicó Marín, a tiempo de manifestar que existen países que trabajan años e invierten millones para una medalla.

“Las olimpiadas son la cúspide, donde no queremos sólo ir a participar, sino ir a competir, ir a pelear por algo”, dijo por su lado, Ángela Castro, quien posiblemente sea la abanderada de Bolivia, por tener la mejor marca técnica.

Algo que los marchistas de Bolivia tienen a favor es su técnica impecable, algo que en todas las competencias internacionales destaca, porque terminan sin ninguna amonestación de parte de los jueces.

“El estilo de marcha de Bolivia, es decir,de la profe (Marín), es muy elogiado, siempre la felicitan. La marcha atlética es muy complicada, porque pueden descalificarnos en plena competencia, o incluso una vez que ya hayas cruzado la meta. Eso quiere decir que en la prueba no sólo sufrimos de no poder lograr nuestros tiempos, sino de ser descalificados. Tenemos que cuidarnos de los jueces y además ir a un buen ritmo. No es como en la maratón, donde tú puedes correr como quieras, en la marcha tú tienes que tener una técnica, porque los jueces te ven cada vuelta que das”, comentó Castro.

Pese a que existe un presupuesto de 15 mil dólares para la preparación del equipo Bolivia que participará en los Juegos, Marín reconoció que incluso ese presupuesto es insuficiente para asistir a algún campamento fuera del país. “Para lo único que alcanzó es para hacer mini campamentos en el lago Titicaca. Nosotros seguiremos trabajando como hasta ahora con lo poco que tenemos y haremos nuestro mejor esfuerzo”, concluyó.



OPINIONES

Ángela Castro. Atleta

“Iremos a pelar, no sólo a participar”

“El equipo está fuerte, estamos trabajando en equipo y eso me ayuda bastante. He mejorado trabajando así y por eso hemos ganado también por equipos en el Sudamericano, en Ecuador. Las olimpiadas es la cúspide, donde no queremos ir sólo a participar, sino a competir, a pelear por algo, porque ya basta de sólo estar presentes”.

Wendy Cornejo. Atleta

“El sueño se trazó desde muy pequeña”

El sueño de ir a los Juegos Olímpicos se trazó desde muy pequeña, y desde ahí empecé a trabajar para conseguir estos logros. Estamos muy agradecidos con mi entrenadora, se lo debemos todo a ella, porque es la que nos dedica todo su tiempo, es la que construye el equipo que tenemos. También debemos agradecer a la CBN con el programa de los Tunkas, por todo el apoyo que nos dan”.

Stefany Coronado. Atleta

“Es mi primer año en los 20 kilómetros”

“Es mi primer año en 20 km. Fue un trabajo arduo ya que fuimos subiendo poco a poco. Mi entrenadora (Martha Marín) iba planeando desde años pasados las olimpiadas de Río. Ella sabía que yo iba a estar en la categoría mayores y podía optar para ir a los Juegos, entonces nos preparamos para eso. La transición fue dura, pero al final lo logré”.



LA FUERZA QUE ANIMA EN LOS ÚLTIMOS KILÓMETROS

Así como en todas las carreras de largo aliento, en los últimos cinco kilómetros es donde las piernas empiezan a fallar y se debe apelar a la fuerza mental y emocional para sacar adelante la competencia, con la finalidad de lograr los objetivos trazados.

En muchos casos esa fuerza la brinda la familia, el recuerdo de toda esa gente que esta atrás apoyándolas, señalan las atletas.

En el caso concreto de Stefany Coronado, contó una anécdota muy interesante. Comentó cuál fue el recuerdo que la ayudó a finalizar la prueba en La Coruña, España, competencia en la que logró la marca mínima con un tiempo exacto de 1h36’.

“Justo antes de viajar a La Coruña, fuimos a la cumbre y como en Roma me resfrié, la profe me prestó su rompe vientos que tapaba casi toda mi cara. Estábamos en la cumbre entrenando, cuando de pronto paso una vagoneta que se paró a unos metros de mí y me dio miedo, porque es vacío el lugar. Entonces se bajaron tres señores y me dio mucho más miedo. Cuando de pronto, empezaron a gritar ‘vamos Stefany tú puedes, somos tus fans te seguimos’. Nunca los había visto, pero ellos me decían ‘vamos tú puedes, puedes lograr la marca’. Y el miedo que sentía cambió totalmente, eran personas desconocidas que me reconocieron, se bajaron sólo para apoyarme, se sacaron una foto conmigo. Te das cuenta que son muchas personas que te van apoyando y eso fue lo que me dio fuerzas”, contó Coronado.

En el caso de Ángela Castro, relató todo lo que su padre le decía para animarla. Como cuando ganó una medalla de plata, le dijo: “plata, porque tienes que ser segunda, tú puedes ser campeona. Por eso lucharé siempre para ser la primera, como mi papá luchó hasta el último día de su vida”.

Otro aliciente para ambas es su entrenadora Martha Marín, que en cada paso que dan está ahí no sólo animándolas, sino también recordando que pueden más y que deben arriesgarse.

“Mi entrenadora en las dos últimas dos vueltas me decía, apretá, apretá estás a ritmo, lo vas a lograr”, comentó Coronado.