Es cierto que en todo el país los deportistas no reciben el apoyo necesario para entrenar sus disciplinas como debería ser, pero es un caso especial el del deporte integrado y para ciegos, porque estos atletas ya deben superar sus miedos y frustraciones para empezar a practicar, a ello se suma que en el país no existen escenarios deportivos adecuados para ellos y para finalizar deben enfrentar el poco apoyo económico para sus actividades.
Si bien a nivel nacional la Federación Boliviana de Deportes para Ciegos es una de las dos instituciones acreditadas ante el Ministerio de Deportes y recibe apoyo económico, a nivel departamental la situación es muy diferente.
Hace algunas semanas una delegación de 10 personas asistió al campeonato nacional de fútbol de salón para ciegos en Sucre, pero debido a que la Asociación Departamental de Deportes Especiales para Personas Ciegas de Cochabamba (Addepcic) no cuenta con personería jurídica, no pudo acreditarse ante la Asamblea Departamental del Deporte ni al Servicio Departamental de Deportes y consiguientemente no pudo acceder al apoyo económico que reciben todas las asociaciones, para la organización de sus torneos, viaje de delegaciones, etc.
Aunque esta falta de apoyo va más allá de los deberes de las autoridades, por el tema legal, lo más triste es que algunos miembros de esta delegación tuvieron que vender sus trofeos para costear el viaje.
“Fuimos a ofrecer al mercado nuestros trofeos y como no son nuevos, nos dijeron que no pueden pagar el 50 por ciento de su valor. No nos queda otra si queremos viajar, porque no tenemos con que pagar el pasaje, por suerte tenemos el descuento de la Trans Copacabana, porque si no el viaje se nos haría más caro”, dijo Ramiro Huanco, jugador del equipo de fútbol de salón, a tiempo de explicar que como asociación deben participar en los nacionales, sino quieren ser sancionados por la federación.
Huanco cuenta que “el año pasado estuvimos bien adelantados con los trámites para sacar la personería, pero justo nuestro presidente falleció y no pudimos recuperar los documentos, ahora debemos empezar de cero”.
La versión fue respaldada por el presidente de la Addepcic, Edwin Díaz, quien dijo que la asociación funciona desde 2004, pero que después del fallecimiento del presidente de la asociación se quedaron sin papeles y sin material deportivo.
Falta de infraestructura
Ni en Cochabamba ni en el país existe un escenario deportivo adecuado para el deporte integrado o para ciegos, motivo por el que todas las asociaciones deben buscar espacios libres en los escenarios ya ocupados por las asociaciones de cada disciplina para entrenar.
Si para las disciplinas en sillas de ruedas, que están reconocidas y cuentan con el apoyo de las autoridades no se construyó hasta la fecha el coliseo que debía emplazarse en la zona de la Costanera, debe ser mucho pedir que existan algunos escenarios adecuados para el deporte para ciegos, como el gol ball o el fútbol de salón, que requiere que el campo tenga unas barandas seguras para que el balón no salga de la cancha, o contar con los arcos de la medida para el gol ball.
Pero además en Cochabamba, la gente que practica estos deportes no tiene el material deportivo adecuado para entrenar. Por ejemplo, tanto para el fútbol de salón como para el gol ball, se requieren balones que tienen un cascabel dentro y generen un sonido para que los jugadores se ubiquen. Al no tener los balones, tuvieron que ingeniárselas, se hicieron sus propios esféricos con pelotas comunes y les hicieron poner los cascabeles dentro.
Dato
Para la federación internacional del deporte para ciegos “el deporte es el mejor medio para integrar de las personas con discapacidad y ciegas, ayudando a superar su minusvalía potenciando su autoestima, capacidad de superación y normalización en su entorno, y en definitiva, su plena realización”.
PARA PERSONAS CIEGAS
En Bolivia existen ocho disciplinas
La Federación Bolivia de Deporte de Ciegos (Febodec), fundada en 2004, regula la actividad deportiva en ocho disciplinas diferentes, aunque a nivel internacional existen 15.
Los deportes que se practican en el país son: fútbol de salón B1-B2 varones, gol ball B1 damas y varones, atletismo B1-B2 damas y varones, ajedrez B1 damas y varones, natación B1-B2 damas y varones, levantamiento de pesas damas y varones (a prueba), judo damas y varones (a prueba) y torball B2 damas y varones (por ingresar a prueba).
A nivel internacional, la federación organiza y regula en las siguientes áreas: atletismo, ciclismo, diez bolos, esquí alpino, esquí de fondo, fútbol sala, gol ball, judo, natación, nueve bolos, powerlifting, showdown, tiro, tiro con arco y torball.
Clasificación
Con el pasar de los años se ha desarrollado un sistema de clasificación de los atletas, en tres niveles, según el grado de discpacidad visual, con el fin de organizar competencias equilibradas y adaptar las reglas e instalaciones. Los tres niveles, denominados B1, B2 y B3 son:
B1: Totalmente o casi totalmente ciego; desde no percepción de luz a percepción de luz pero inhabilidad para reconocer la forma de una mano.
B2: Parcialmente vidente; capaz de reconocer la forma de una mano hasta una agudeza visual de 2/60 o un campo visual de menos de 5 grados.
B3: Parcialmente vidente; un campo visual desde 5 a 20 grados.
REGLAS
Aspectos básicos del futsala para ciegos
Las reglas básicas para el fútbol de salón para ciegos son las siguientes:
Equipos: Dos equipos integrados por cuatro jugadores ciegos y un arquero no ciego.
Tiempos: Dos tiempos de 25 minutos cada uno, con una pausa de 10 minutos.
Cancha: De cemento o mosaico y siempre al aire libre (por razones de acústica). Debe tener 40 metros de largo por 20 de ancho y muros en los laterales.
Guía y orientación: El guardameta, el técnico y un guía ubicado detrás de la valla rival, tienen la función de orientar a los jugadores.
Guardameta: No debe haber estado federado bajo la FIFA dentro de los cinco años.
Pelota: Posee cápsulas sonoras.
Árbitros: Hay dos árbitros, uno principal y el otro asistente.
Aunque a nivel internacional el fútbol de salón para ciegos también es llamado fútbol B1 porque está diseñado para ser jugado sólo por personas ciegas pertenecientes a la clase B1, en Bolivia se practica con personas con todo tipo de discapacidad visual, pero para que no exista ventaja entre un equipo u otro, todos los jugadores, excepto el arquero, deben usar unos antifaces sobre los ojos.
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