Yony Barrios Pimentel Aprovecha segunda oportunidad

Había pasado seis meses desde que decidió practicar judo a conciencia en 2004, a puro músculo y fuerza se había consagrado campeón departamental y, por ende, conseguido el boleto para llevar la verde, blanco y verde al nacional, pero un accidente en moto echó al suelo todas sus aspiraciones y lo alejó del deporte por siete años. Yony Barrios Pimentel dejó atrás aquel idilio al fracturarse el tobillo y ver cómo todo lo que soñó se desvanecía de un rato para otro. Pero retomó su camino en el judo en 2013. Se convirtió en campeón departamental y nacional nuevamente y desde entonces está invicto en la categoría +100 kilogramos. El fin de semana pasado, fue el único judoca del torneo que consiguió tres medallas doradas. Espera la confirmación de la Federación Boliviana de este deporte para integrar el seleccionado boliviano que participará en el campeonato sudamericano en Perú a inicios de noviembre.

Una dura caída que superó. "Ese año (2004) gané el departamental y estaba clasificado para ir a luchar en el nacional, pero tuve un accidente en moto que me dejó fuera por siete años", comentó Barrios. Dolor fue lo que vivió el judoca ya que parecía que nunca iba a retornar al tatami a combatir. "El gran problema que tenía era mi tobillo, me lo fracturé y no podía sanar. No podía estar mucho tiempo parado y tenía que sentarme. No podía completar mi rutina en el gimnasio porque estaba adolorido", acotó Yony. En ese tiempo se dedicó, además de su recuperación, a trabajar en seguridad y de guardaespaldas, este último trabajo que aún conserva. En 2012 le llegaron buenas noticias. Ya cansado de ir de doctor en doctor buscando alguna solución al dolor, conoció a un médico que lo puso a punto y le devolvió las ganas de volver a competir. "En 2013 ya tenía las condiciones físicas óptimas y volví a entrenar. "Desde que retorné he sido campeón invicto en mi categoría en libre", afirmó el judoca.

Las aspiraciones son grandes. En el nacional del anterior fin de semana obtuvo tres preseas doradas y con ello aseguró un lugar en el combinado boliviano que participará en el torneo sudamericano en Perú en noviembre, aunque está a la espera de que la Federación le haga oficial el anuncio. "El objetivo es llegar a los Odesur (Cochabamba) 2018 en las mejores condiciones", dijo Yony. Tiene historial ya que en 2015 logró el tercer lugar en el sudamericano que se realizó en Santa Cruz. Ya no practica judo solo. Su esposa hace tres meses que incursiona en este deporte, motivada además por sus tres hijos, Carlos Manuel (11 años), Yony Junior (7) y Fabricio (5), quienes siguen el legado de su padre. "Vamos en ascenso, desde que volví a mi nivel he ido mejorando", finalizó el judoca.