La piscina pública Julio León Prado (JLP) pasó de ser una de las más accesibles a estar entre las más caras de la ciudad de Cochabamba, debido a que la Alcaldía cedió el predio en comodato a la empresa Santorini sin convocatoria ni licitación tras recuperar la infraestructura en 2015, después que fue administrada por una fundación.
El secretario de Desarrollo Humano de la Alcaldía, Andrés Cuevas, confirmó que Santori pretende cobrar 250 bolivianos la hora de clases de natación cada mes. Ante los cuestionamientos del incremento de 140 a 250, dijo que el precio fue fijado por la adjudicataria y la Alcaldía se limitó a sugerir que el precio sea menor, sin tener resultados.
Ayer se constató que una de las piscinas más prestigiosas en la zona norte cobra una mensualidad de 280 bolivianos y otras 200. La piscina más accesible es la Marquina, del Servicio Departamental de Deportes, con un pago de 110 bolivianos al mes.
Antes del comodato, la piscina JLP cobraba 140 bolivianos al mes por una hora de clases. Los deportistas que se preparaban para competencias internacionales cancelaban 280 por dos horas diarias de clases. Ayer se acordó cobrar 300 por dos horas al club Wilstermann.
Cuevas aseveró que la Alcaldía de Cochabamba no tiene recursos para refaccionar la piscina. Por eso decidieron firmar un convenio de comodato por seis años con Santorini, una empresa unipersonal.
“No sólo se trata de rehabilitarla, sino que se tiene que contratar profesores, personal administrativo y hacer el mantenimiento. No tendríamos el dinero para eso”, justificó .
La Alcaldía entregó el comodato a Santorini sin lanzar una convocatoria pública únicamente basada en la propuesta de la exvoleybolista, Marylin Triantáfilo. “Ella trajo su propuesta y era muy buena así que la aceptamos”, señaló el jefe de la unidad de Promoción Deportiva, Dussan Balderrama.
Los funcionarios expresaron que no pueden dar a conocer la propuesta ni el convenio para la administración de la piscina JLP, salvo que se realice un requerimiento escrito.
El concejal Sergio Rodríguez dijo que es absurdo que la Alcaldía asevere que no tiene recursos para administrar la piscina.
Explicó que “el presupuesto 2016 para Desarrollo y Promoción del Deporte es de 73,8 millones de bolivianos. Mientras, la ejecución a la fecha es de 31,9 millones, el 43 por ciento”.
Siguió: “Es decir, sobra en caja y bancos 41,9 millones de bolivianos. Además, la Alcaldía también presupuestó 1,5 millones de bolivianos para Promoción Deportiva cuya ejecución al 22 de este mes es de 99.600 bolivianos, el seis por ciento”.
Cuevas agregó que la Alcaldía no invirtió en refacciones. “Sólo hicimos algo de limpieza y el inventario”, dijo.
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