El squash, una disciplina muy parecida al raquetbol, incursiona en el país con gran ímpetu porque a tan sólo meses de iniciar con su práctica, los deportistas nacionales ya cosecharon las primeras medallas.
Además, el squash está dentro del circuito de los XI Juegos Suramericanos Cochabamba 2018, y al igual que el raquetbol es una de las disciplinas que mayor proyección tiene para conseguir medallas para Bolivia.
Es por esta razón que por diferentes gestiones de la dirigencia de la Federación Boliviana de Squash, el Country Club Cochabamba, el viernes 5 de junio, aceptó la propuesta de construir tres canchas reglamentarias para esta disciplina.
Las obras debieron iniciarse el 1 de julio, pero por diferentes circunstancias recién se empezaron esta semana. La vicepresidente de la federación, Alba Gamarra, asegura que los trabajos se entregarán en la primera semana de noviembre, a tiempo para el Sudamericano que iniciará el 29 de noviembre y finalizará el 5 de diciembre de esta gestión.
Gamarra explicó que no se construirán las canchas, sino que se modificarán tres del complejo de raquetbol del Country Club.
"Cambiaremos todo el piso de los tres escenarios y lo nivelaremos para que tengan el ancho y largo reglamentario", explicó.
La idea del Country Club es que estas canchas sirvan no sólo como sede de torneos nacionales e internacionales, sino puedan ser útiles para la preparación de los deportistas con miras a los XI Juegos Suramericanos 2018. Además, el sueño de la federación es que la disciplina sea tomada en cuenta para los Juegos Olímpicos 2020, y en este evento ganar una medalla olímpica para Bolivia.
Sin canchas reglamentarias
Si bien la práctica del squash en Bolivia se inició hace varios meses y ya se disputaron varios torneos nacionales en diferentes ciudades del país, no existen canchas reglamentarias para el ejercicio de la disciplina, razón por la que se deben adecuar las canchas de raquetbol para que se parezcan en algo a las dimensiones requeridas por el squash.
"Para las prácticas y los torneos se deben recorrer los vidrios y hacer más grande el campo de juego", explicó Alba Gamarra, vicepresidente de la Federación Boliviana de Squash, a tiempo de señalar que incluso se debe realizar un trazado diferente en el terreno. "El trazado del squash es diferente al raquetbol, debemos pintar con otros colores para que los deportistas no se confundan y puedan jugar con tranquilidad".
Es por esta razón que es prioritario contar con escenarios con las dimensiones y trazados oficiales para que los deportistas compitan en las mismas condiciones.
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