El atletismo que quiere más y más

El atletismo tuvo épocas hermosas y héroes de nombres que en el pasado, en unos casos, y en el presente hasta hace poco, en otros, se hicieron famosos.

Es probable que estos no sean los mejores tiempos del denominado deporte base en el país, pero nada impide que recobre fuerzas y encuentre eco en una juventud que, a veces, prefiere otras disciplinas más populares o de mejores recompensas económicas.

Hay un dato no menor que invita a tener esperanza en que vendrán días mejores: mientras en La Paz se ha descuidado la que era una hermosa pista en el estadio Hernando Siles, en ciudades como Sucre y Oruro, por citar sólo a dos, se han instalado escenarios dignos de los mejores del continente, y ese es más que un aliciente para que la juventud siga practicando esta disciplina.

Nuestro atletismo tiene una gran historia que no merece languidecer. Y por supuesto, en el día a día, procura encontrar a otras figuras como lo fueron, mientras estaban activas, Julia Iriarte, Mery Rojas, Isabel Alemán, Giovana Irusta y Martha Novillo. Otros como Lionel Caero, Alejo Montaño, Policarpio Calizaya, Eloy Quispe y Johnny Pérez. El atletismo, disciplina fundamental, no puede, no debe morir.

Más nombres y otras historias

Cueto y el padre
Nuestro ciclismo tuvo y tiene nombres sobresalientes —Édgar Cueto, si se nos permite citar a una de tantas figuras memorables— y parece mantener su vigencia, con ramificaciones como el bicicross o bicimontaña.
Pero hay que hacer justicia, y reconocer que la dupla padre Eduardo Pérez-Radio Fides hizo y hace una tarea increíble a favor de un deporte que pudo haber muerto por inanición.

Deporte ciencia
Silencioso como sus partidas, el ajedrez boliviano tuvo y tiene cultores que merecerían un libro: desde Johnny Cueto —primer Maestro Internacional en el año 2000— hasta Cídar Humérez, aquel campeón nacional invicto de los años cincuenta y sesenta, es una disciplina que cada día suma un nuevo cultor. Hoy por hoy destaca el único Gran Maestro Internacional que tiene nuestro país, el chuquisaqueño Oswaldo Zambrana.

Aquellos tenistas
Uno de nuestros compañeros de redacción en Marcas aportó una frase sobre la que es su disciplina preferida: “El tenis es una recreación de muchos y una pasión de pocos. Sueño con volver a tener tenistas como Eduardo ‘Pacho’ Gorostiaga, un Ramiro Benavidez o un Mario Martínez. Volvería a ser feliz”.