Inicios de grande. "En su primera competencia a sus seis años fue último (igual que el caso del multimedallista olímpico Michael Phelps); sin embargo, siguió compitiendo, mejorando y analizando cada parte de la natación", expresa José Quintanilla, entrenador de la selección nacional y padre de la actual promesa de la natación boliviana.
A sus 15 años, el "Tiburón cruceño" ha roto récords nacionales consiguiendo además medallas de oro en 50 y 100 metros libres.
"Sabía que tenía que acortar varios segundos. Pero no me importaba, sabía que podía conseguirlo y lo demostré ante los mejores", explica Quintanilla con una sorprendente tranquilidad.
'Condimentos' de un campeón. "Desde su mente es un nadador diferente, pero su biotipo le permite nadar rápido sin tener que realizar un gran número de brazadas. Pero su mejor cualidad es su técnica. Todo lo que refiere a la mejor forma de nadar él lo hace a la perfección", agrega el DT de la selección.
Entre tanto, las dos medallas de oro atrajeron a veedores de distintas instituciones extranjeras del exterior que ven en José un joven con un excelente talento para desarrollar.
"Estoy muy contento por todo lo que hemos logrado. Pero por ahora no puedo pensar en otra cosa que no sea entrenar para llegar a Río 2016", sostiene el nadador que tuvo una marca de 25s58c en los 50 metros libres para quedarse con el mejor tiempo a nivel nacional.
Los próximos retos del "Tiburón cruceño" serán en los campeonatos nacionales en noviembre, los cuales serán clasificatorios al sudamericano juvenil que se llevará a cabo en Brasil, en el mes de marzo.
Para el nacional, Quintanilla participará en 18 pruebas en donde buscará la victoria en cada una de las distintas modalidades en las cuales será seguro protagonista.
El "Tiburón cruceño" busca su presa, que son victorias, récords y escribir la nueva historia de la natación boliviana.
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