La piscina olímpica de Oruro no tiene administrador y no funciona

 Uno de los “elefantes blancos” que se tiene en el municipio es sin duda la piscina olímpica edificada a lado del estadio “Jesús Bermúdez”, misma que fue concluida y entregada en febrero de 2020, pero que hasta la fecha no tiene un uso adecuado, desde el Sedede se menciona que la principal razón es la falta de la designación de un administrador y personal para operar en este escenario.

Con una inversión de 43 millones de bolivianos, el 18 de febrero del 2020 se inauguró de forma provisional la piscina olímpica de la zona Norte, a pesar que faltaban varios aditamentos contemplados dentro de los contratos y anuncios efectuados por las autoridades, en esa ocasión se indicó que la entrega definitiva se cumpliría en mayo de ese año y que el costo mensual de mantenimiento estaba entre los 50 mil y 80 mil bolivianos.

Desde su inauguración ya se tenían observaciones porque no se contaba con personal ni administradores designados para la correcta utilización del espacio deportivo, tampoco se sabía cómo se iban a cubrir los costos de mantenimiento, quedando en una incógnita el cómo se procedió con la inauguración provisional.

A esto se sumó el tema de la pandemia por el Covid-19 que impidió que el espacio deportivo sea puesto al público o en favor de los deportistas, el tiempo fue pasando y a pesar de que las actividades deportivas volvieron con cierta normalidad el tema de la piscina olímpica no fue subsanado y continuó con las puertas cerradas.

Esto generó una serie de repercusiones de parte de dirigentes y deportistas de la natación, porque se vieron afectados en el tema de sus entrenamientos, la explicación de los responsables del Servicio Departamental de Deportes (Sedede) fue que faltaban algunos trámites administrativos y de designación de personal, obviamente sumado a que el tema de la pandemia imposibilitaba realizar algunas acciones.

Actualmente el espacio deportivo se encuentra cerrado y con una de las piletas sin el líquido elemento, según explicó el actual director del Sedede, Juan Luis Soliz, quien mencionó que el problema para la apertura de este espacio deportivo es la falta de un administrador, algo que debe ser subsanado por la Gobernación, aunque en esto también se tiene de por medio el aspecto de recursos económicos para activar el escenario deportivo.