El atleta orureño Héctor Garibay demostró temple y perseverancia, colocando a Bolivia en la cima en la Maratón de Buenos Aires y con un histórico tercer lugar en la carrera de San Silvestre en Sao Paulo, convirtiéndose en un ejemplo para los fondistas que ven en él un ejemplo a seguir por los resultados registrados.
“Detrás de mí hay varios deportistas también en Oruro que siguen mis pasos, también los he seguido. Ellos están motivados al saber que sí se puede competir contra los más grandes”, declaró Garibay, en referencia al tercer puesto en San Silvestre, donde quedó rodeado por los atletas etíopes y brasileños, con quienes compartió los puestos de vanguardia.
Garibay ha pasado a ser un emblema del atletismo orureño después de un año inolvidable. En abril de 2021, ganó los 10 mil metros en el evaluativo en Cochabamba con 30’21”18. En la misma prueba, pero en el Sudamericano en Guayaquil fue sexto con 30’35”85.
En mayo, también corrió la Maratón en Asunción (Paraguay), como parte del Sudamericano, quedando en la segunda casilla con 2h22’27”. En octubre, ganó la Maratón en Buenos Aires, con 2h11’58”, a 28 segundos de la marca para clasificar al Mundial en Oregón (Estados Unidos). Cerró la temporada con el tercer lugar en San Silvestre 45’15”.
El fondista alternó sus entrenamientos con su trabajo como conductor de taxi en Oruro. Por día recorre un promedio de 25 a 30 kilómetros, llegando a los 180 kilómetros por semana, cumpliendo con el plan elaborado por su entrenadora, Nemia Coca, en el club Pie de Viento, consistente en pruebas de velocidad, resistencia y circuitos en las afueras de la ciudad o en la pista del estadio “Jesús Bermúdez”.
“Hacemos bastantes gastos en el entrenamiento, en la ropa deportiva, necesitamos becas como el proyecto Tunkas del Viceministerio de Deportes, agradecido con eso para poder sobresalir en los demás torneos internacionales”, agregó Garibay, quien pide colaboración para los demás atletas orureños y agradeció la ayuda de la Gobernación y del Sedede de Oruro.
Mil dólares es el gasto promedio que realiza Garibay en su preparación, incluyendo la alimentación, vitaminas, hidratación y zapatillas. Por el constante recorrido, requiere de zapatillas profesionales que eviten las lesiones y que cuestan de 2.000 a 2.500 bolivianos.
El siguiente desafío de Garibay será la Maratón en Sevilla (España), el domingo 20 de febrero. Consiguió el apoyo en pasajes para él y su entrenadora en la búsqueda de la marca para ir al Mundial de atletismo del 15 al 24 de julio de este año.
La colaboración en los pasajes fue posible después de la reunión que el atleta sostuvo el pasado viernes con el Presidente del Estado, Luis Arce, y con la viceministra de Deportes, Cielo Veizaga.