Krystin, campeona del mundo, pide flexibilidad

A los 14 años, la cochabambina Krystin Salinas se consagró campeona invicta (dobles damas) en el Mundial Juvenil de Ráquetbol que se celebró hace algunos días en San José, la capital de Costa Rica.

La medalla de oro en dicha categoría llegó tras el esfuerzo, sacrificio, empeño y concentración fundamentales. En el cotejo definitorio iba perdiendo junto a su compañera de juego Valeria Miranda frente a una dupla mexicana (8 a 5), pero juntas remontaron la suerte y ganaron el primer set por 15 a 8. En el segundo, también estaban con el resultado adverso. Sin embargo, el “ñeque cochabambino” y el esfuerzo se conjugaron de modo perfecto para dar paso a la victoria (15 a 11) y la llegada de la presea más codiciada, misma que las certificó como las número uno del globo en la categoría 14 años.

Fue una experiencia inolvidable para Krystin y Valeria. El nivel técnico general fue muy fuerte, sobre todo el que expusieron las mexicanas. Por ello crece aún más la gesta de haber superado ocho partidos sin haber cedido un juego. Las palabras de agradecimiento del equipo fueron dirigidas (no podría haber sido de otra manera) a los entrenadores Felipe Mercado y Brayan García.

1 Destreza más

Krystin Alessandra también es virtuosa en baloncesto. De hecho, se desempeña como armadora.

Krystin dijo sentirse “muy feliz” al saberse como una de las mejores de Bolivia, no obstante suele tropezar con las autorizaciones de su establecimiento educativo. De todas formas está comprometida a poner más esfuerzo para incrementar los pergaminos, siempre, con la premisa de enorgullecer a la Tricolor y seguir siendo la mejor del país.

Es consciente de que la entrega personal produce frutos, como sucedió en el Open American Iris que se celebró en la Llajta en abril, torneo en el que separó la medalla de plata. Posee bastante experiencia. Que sus escasos 14 años no engañen, pues ya participó en citas internacionales, nacionales y locales.

Ante el desafío de escoger una frase, Krystin no dudó: “A veces hay piedras en el camino, pero tenemos que superarlas y saltarlas para llegar a nuestro objetivo”.

Lamentó no contar con el apoyo suficiente de su colegio, Maryknoll, en materia de permisos y flexibilidades que le hagan menos dificultoso defender los colores de Cochabamba y Bolivia en los campeonatos que se presentan en el calendario. “Tengo que rogar para el permiso”, relató la raquetbolista, que en 2020 cursará el cuarto año de secundaria.

¿Si tiene otras pasiones y habilidades poco conocidas? Cantar y posar para las fotos. Es una chica solidaria y alegre. Muestra varias facetas.